jueves, 29 de enero de 2009

Un cuento de mujeres....que querían ser felices....

11 comentarios:

LaLa dijo...

Este cuento está muy bien, te enseña que no tienes que quedarte sentada a esperar que la vida llame a la puerta, que no tienes que esperar a que un hombre te encuentre por casualidad porque no sales y que te programe tu vida desde el mismo momento en el que descubres que es el amor de tu vida. Te enseña que debes levantarte de esa silla, tan incómoda, y que debes buscar tú a tu principe, que debes hacer aquello que te gusta y no lo que les gusta a los demás que hagas y también te enseña a no dejarte mandar por nadie y menos por las personas a las que quieres. No te dice que no los escuches, porque ellos están ahí para ayudarte, apoyarte y darte buenos consejos, pero siempre debes escuchar a tu corazón, teniendo en cuenta las decisiones de las personas que te aman, ya que pueden ser de gran ayuda. En un especie de cuento que narra la típica historia de una mujer casada a la que el marido no la deja hacer cosas, pero contada desde una cenicienta que no le teme a su marido. Pero hay maridos que no son como ese principe y terminan con la historia de muchas cenicientas que intentan demostrar que valen mucho, esa es la pena. Poco a poco, lo vamos consiguiendo, y cada vez son menos cenicientas que terminan su cuento. Porque somos nosotras las que ayuda a la sociedad a avanzar, porque son nuestros hijos los que, en el día de mañana estarán ahí para decir "esa es mi madre", porque nosotras lo merecemos.

Laura Gato Román 4ºC

Cristina dijo...

Eso de esperar a un príncipe azul ya está muy pasado,creo que cada vez antes una mujer se da cuenta de que ese tipo de hombres no existe y si existe ya lo tiene otra.Hay que saber decir eso de:¡Qué me espere el príncipe a mí!
yo no me pongo unos zapatos que hacen daño ni cocino perdices si no quiero,el que me quiera me tiene que querer tal y como soy;en chandal o en traje de noche y el "principe azul" de cada mujer es aquel que nos hace sentirnos felices en cualquier momento,estemos bien o mal.
No esperes a tu "principe" de cuento,espera a tu "principe" de la vida real.

Cristina Martín Mariscal 4ºC

Niobide dijo...

Te enseña a ver que los príncipes no son más que falsos engaños que nos han inculcado en los cuentos desde pequeñas. No podemos aguantar a movernos con unos zapatos de cristal que poco a poco nos destrozan por dentro. Tampoco podemos aguantar a que nos manden, que nos digan lo que debemos de hacer o no, que nos corten la libertad. Porque todos somos iguales, tanto príncipes como cenicientas, y por lo tanto tenemos el mismo derecho de que nos respeten y de tirar esos zapatos de cristal, que tanto nos dañan, por la ventana. Lo peor de todo es que no hay un caso, o dos si no muchísimos y que mejor remedio que llamando al hada basta. Saltar de la cama, por la mañana y ver que no tiene sentido seguir aguantando un príncipe bago que te obliga a contradecir tus principios y quitarte esos molestos zapatos de cristal. Me encantó la idea de reflejar el BASTA como un hada basta y más me gusto de comparar al príncipe de un cuento con el de la realidad. Me encantó la ilustración y me parece un tema bastante currado. Me gustaría invitar a las mujeres que se quitaran los zapatos de cristal y que dijeran BASTA.


Gema Cárdenas San Segundo 4ºC

Anónimo dijo...

El cuento me ha gustado porque relata la vida de una princesa que espera a su principe azul y no es como ella se lo imaginaba. Y ella se da cuenta de que la riqueza no lo es todo en la vida, que necesita amor. Se da cuenta de lo mal que lo está pasando y decide cambiar su vida ayudándo a otra gente que está pasando por lo mismo que ella. Al final logra ser feliz, dejando al principe y rehaciendo su vida como ella queria que fuera.


Maria Florencia Palma Dorazio 4º C

Anónimo dijo...

Yo opino que es un cuento que tiene mucha razón, puesto que hemos vividos durante siglos con historias como las de ese cuento, historias que carecen de un final feliz, de novios perfectos y de vidas llenas de felicidad, porque los cuentos son ilusiones de una persona que sueña que su vida sea como la de su propio cuento.
Con el paso del tiempo, las mujeres hemos aprendido que las historias de los cuentos no son reales ni nunca lo serán, porque todos tenemos defectos y no estamos dispuestas a consentir que un hombre nos obligue a hacer cosas que no queremos.
Y sobre los zapatos de cristal y las perdices es la manera de discriminar a la mujer en el cuento. El hombre podria llevar los tacones y hacer las perdices. Con esta última frase quiero decir que el hombre también podría cocinar, ayudar en casa, hacer las compras, etc.

Claudia del Pino - 4ºC

...[*JenniFer*]... dijo...

Es un cuento que refleja las decisiones equivocadas que toman algunas mujeres, piensa que su futuro ya esta escrito, que es así y no entienden el porque luchar contra ellos, incluso siendo algo con lo que no estan agusto o deacuerdo. No se dan cuenta hasta pasado un tiempo que su futuro lo deciden ellas mimas, que solo ellas tienen el mando de decir esto me gusta y esto no. Por lo tanto es lo que quiero para mi.

Siempre cometerás errores, pero cometelos sabiendo que fue una decisión propia que nadie te obligo a hacerlo ni nadie lo decidió por tí.Soy de las personas que piensa que si algo va a hacer para tí llegará, tanto bueno como malo ya esta en tu mano cojerlo o dejarlo, nada se busca puesto que puedes encontrarte con lo peor.
Lavida se vive una sola vez, y tienes que saber vivirla, se tu mismo con tus opiniones, con tus pensamientos, no permitas que nadie te someta a su voluntad. Todas las personas somos moldeables pero para bien, nunca en función de los deseos de otra persona que busca su bienestar propio.Si estas en desacuerdo con algo eres libres de decir BASTA!, tu palabra y tu bienestar esta por encima de cualquiera.

Cenicienta en el cuento aguanta mucho hasta el punto que dice no más, desde ahí empieza a ser ella misma a vivir su vida y no la de otro.Empezó a disfrutar de su única oportunidad de su única vida.

Hoy en día hay muchos cuentos de Cenicienta que terminan mal por desgracia, pero muchos otros que tienen un buen fin, las que realmente saben diferenciar lo bueno y lo que esta bien para si misma. Llorar no siempre es malo, mientras que sea por felicidad, no por golpes que te da la vida, no por que tu vida este llena de sufrimiento. Ten encuenta que nadie merece una lágrima de tí y menos si ese alguien te hiere!.

Jennifer Vila Matus 4º A

Anónimo dijo...

Este cuento me ha gustado mucho, porque todas somos libres y tenemos que hacer lo que no apetezca sin que nadie nos diga que no. Que nadie te detenga, si quieres cambiar tu vida a mejor como cenicienta, si quieres vivir la vida cada segundo eres libre de hacerlo. Y si no encuentras a tu príncipe no te preocupes algún día lo encontraras y serás feliz pero de mientras que nadie te pare. Porque no hace falta esperar a un príncipe para que tu vida tengo sentido para que tu vida este resuelta no hace falta esperar a él, tu vida la haces tú.
me ha gustado mucho en el video que si no quieres ponerte zapatos de tacón no hace falta ponértelos para estar guapa, y estar más elegante, te vistes como quieras sin que nadie te reproche nada ni cómo vas vestida ni cómo vas pintada nada.
hay que ser feliz aunque la vida a veces sea dura pero lo mejor es ser positiva y como he dicho antes somos libres de ser feliz.
Tania Boneta 4ºC

Anónimo dijo...

El mensaje de este cuento es, que cada mujer tiene que luchar por seguir adelante y no aguantar a un hombre que no la trata bién, que le riñe por todo, y ella se tiene que dar cuenta por sí misma, y por muy enamorada que este, tiene que abrir bien los ojos y decir:BASTA, ESTO NO PUEDE SEGUI ASÍN, porque ella tiene que sacar sus propias fuerzas para seguir adelante, para seguir su vida, para difrutas de sus hijos(si los tiene) y buscar a otro hombre que la quiera y la trate como se lo merece, prque ella es una mujer libre sin depender de un hombre que la maltrate, y ella es la que tiene que salir de haí para decirse ella mima: ESA SOY YO. Y que el día de mañana no aparesca en los telediarios muertas por violencia de género, y ver a toda un familia destrozada por culada de un asesino que le ha destrozado su vida poque le ha dado la gana.

Anónimo dijo...

Reflexión de “Cenicienta que no que no quería comer perdices”

No me parece nada correcto la presentación, ya que pienso que intenta desprestigiar al famoso cuento de La Cenicienta, en el cual una humilde sirvienta acaba casándose con el príncipe de su país y acaba siendo muy feliz con él. Pretende hacer que se piense que este cuento es machista y que degrada a las mujeres ya que en el se puede interpretar que las mujeres dependen de los hombres, es decir, que solo pueden conseguir ser felices si se encuentran con un hombre a su lado.
Esta afirmación me parece correcta, ya que se puede ser feliz no necesariamente teniendo un relación, también se puede ser feliz estando sola. Lo que me parece inadecuado es que se utilice para enseñar esto un cuento infantil, que no tiene nada que ver con este tema, y que se intente denigrar comparándolo con un cuento que intenta enseñar una idea machista e inadecuada. Por lo tanto, que se busquen otro ejemplo más acertado o que se inventen otra historia y que difamen de ella y que no pretendan destruir un cuento tan bonito como es La Cenicienta.
Antonio M. Calderón Vera 4ºB

Anónimo dijo...

Hola soy Jesús Blanco de 4ºB y aquí dejo mi comentario del texto:

Yo creo que la intención de este cuento se ve apoyada por los pensamientos igualitarios que se ha conseguido inculcar en nuestra sociedad. En otras palabras, si no estuviésemos mentalizados sobre la desigualdad de género, no diríamos que esperar a un príncipe azul y vivir feliz con él "está pasado de moda" como dicen algunos por aquí.
Aparte, el problema de los asesinatos de género radica en la falta de voluntad de la mujer para dejar al "príncipe azul", que en este cuento se resuelve en menos de dos líneas. Si se solucionase este problema veríamos muchísimo más bajas las cifras de mujeres asesinadas por sus (ex-)parejas. No me malinterpretéis, la culpa la tiene sobre todo el hombre egoísta que maltrata su mujer, por supuesto. En realidad toda la sociedad tenemos la culpa de que este problema esté tan extendido.

Este cuento está bien para ser un mensaje de apoyo general a las mujeres que sufren maltratos, pero pienso que deberían haber profundizado un poco sobre cómo solucionar todos los problemas que nombra este relato.

Por cierto, en mi opinión los comentarios manuscritos pequeños de la autora me parecen bastante graciosos. :)

Anónimo dijo...

Trabajo realizado por Ana Belén García Caro de 4ºB.

Debo reconocer que al terminar de leer este texto se me ha puesto la piel de gallina. Siempre o al menos casi siempre nosotros, crecemos con la ilusión de encontrar ese príncipe azul (o ya sea rojo, verde… no existe) siempre creemos que una persona llegará a nuestra vida sin más y nos hará vivir un sueño de cuento de hadas, vivimos con ese deseo, pero ese deseo no se cumple, la mayoría de las personas te fallan y ni los príncipes mas azules son perfectos, no debemos de pensar que alguien tiene que venir y hacernos felices, tenemos que ser felices por nosotros mismos, mediante las cosas que conseguimos en nuestra vida, por nuestro carácter, nuestra forma de ser, tenemos que valorarnos a nosotros mismos antes de valorar a nadie y por supuesto querernos a nosotros mismos si queremos querer a otros, los príncipes azules existen en los cuentos, en la vida real como mucho existirán personas que te quieran sinceramente y te quieran hacer feliz pero no más. Quiérete, valórate no esperes que nadie venga a hacerlo es tu misión y en mi opinión lo mejor es que te quieras por lo que tu eres y no por lo que los demás crean.